sábado, 11 de octubre de 2008

CAMINO


Camino en el viento,
recogiendo pedazos de mis pensamientos,
bebiendo de ilusiones que quedaron lejos,
uniendo los despojos de mis recuerdos.

Camino con el viento,
rumbo hacia ninguna parte,
no hay horizonte que pueda ver,
ni hay mañana que esperar.

Camino sin dejar huellas,
me dirijo hacia ningún lugar,
pero hay un ardor que me guía,
vivir día a día, instante a instante,
cada uno de los ahora
toda la eternidad.
*

3 luces en el Silencio:

Anónimo dijo...

Me parece un poema fascinante, lleno de verdad y autenticidad en la conexión del autor con el Creador. Aquel es unstrumento de Este que lo utiliza como conductor por el estado de consciencia adquirido. Gracias.

Anónimo dijo...

Todo está grababo en nuestro interior. O quizás la inspiración nos convierte en conductores de los planes de Dios. O quizás como dijo el poeta "caminante no hay camino se hace camino al andar". Y quizás solo hay instantes y ahoras sin más. Pero en cualquiera de cuantos casos hubiera deseo que tu estés Señor... y de lo que sí estoy seguro es que con el silencio y la fascinación que me produce la belleza, siento una plenitud interior que me colma de paz y bien estar.
Conocer esta escuela y leeros me complace notablemente. Ver, escuchar y leer a Moratiel me consuela y me hace sentir vuestro hermano.

àngels dijo...

Amigo Miguel Ángel, agradezco tus palabras muy sinceramente, te diré que este poema como otros, son simples pensamientos, instantes de un ahora cualquiera en el caminar de la vida.
La vida es una sucesión de momentos únicos que hay que vivir, así lo aprendimos de Moratiel, momentos que muchas veces perdemos por estar pendientes del antes o el después, mi "deseo" es precisamente no desear, simple y llanamente vivir cada momento, cada instante, cada ahora como lo que es: algo único e irrepetible. Sin más.

Un abrazo y sé bienvenido.